El profesor valenciano JOSEP LLUÍS DOMÉNECH publica 107 libros en 38 años

Psicólogo, pedagogo, historiador, maestro de enseñanza primaria, profesor universitario y de instituto, lingüista, miembro de la Academia de Cultura…

Entre libros. Josep Lluis Doménech Zornoza, en su despacho de Valencia, rodeado de volúmenes. :: IRENE MARSILLA

VICENTE LLADRÓ | VALENCIA. JOSEP LLUÍS DOMÉNECH ZORNOZA es, sin duda, el escritor valenciano más prolífico. Con los dos nuevos libros que está ultimando y aparecerán en breve sumará los 107 publicados en 38 años, desde que en 1975 publicó el primero. Aunque su primera obra que alcanzó la relevancia de un premio la escribió en 1967: un ensayo histórico sobre el Descubrimiento de América en el que prestaba especial atención a la participación valenciana en su financiación a través de Luis de Santángel, «porque siempre se ha silenciado mucho el protagonismo valenciano».

Este profesor universitario y de instituto, maestro también de enseñanza primaria, jubilado como tal desde hace unos meses, rezuma valencianía por los cuatro costados y toda su obra se enfoca en clave valenciana. Y si se le pregunta por la eterna cuestión lingüística: valenciano o catalán, asegura que él no entra en polémicas estériles, prefiere ir al grano de lo realmente importante y definirse como partícipe de la ‘tercera vía’, o de su ‘tercera vía’.

Natural de Alberic, doctor en Psicología, licenciado en Filosofía y Letras y en Ciencias de la Educación, pedagogo, lingüista, profesor de valenciano, iniciado en Teología, conferenciante, miembro de la Academia de Cultura Valenciana y de un sinfín de asociaciones, despliega un currículum casi inabarcable en el que no falta tampoco su pasión por la agricultura y su dedicación directa en unos campos de cítricos que tiene en La Garrofera, a caballo entre los términos de Alzira y Guadassuar.

Es decir, que para completar su vasto despliegue de conocimientos históricos y culturales sobre todo lo valenciano, ni siquiera le falta el recurso agrícola y naranjero, que vive y sufre en primera persona, para que nadie se lo cuente de oídas.

Las dos obras nuevas a punto de editarse son de poemas; una, metafórica, sobre ‘El meu mon en quatre estacions’, y la otra, reflexiva, ‘Un any, una vida, una història’.

Sin embargo, del resto de su obra, sólo otros seis volúmenes son de poemas; la mayoría son de ensayo, así como libros de texto que se siguen dando en centros universitarios, institutos y colegios de primaria sobre las más diversas materias de su amplia formación: geografía, historia, ciencias naturales, conocimiento del medio, musicoterapia, pedagogía, lengua valenciana, práctica del estudio…

En realidad escribe y habla de lo que sabe y domina bien, y, según explica, a base de esforzarse continuamente para saber más «puedo seguir escribiendo». Así que no se sabe bien dónde empieza esta espiral de conocimientos, de la que dejó un buen resumen, en el año 2000, con su libro sobre ‘Cultura popular valenciana’, si bien tiene un reconocido recuerdo hacia Josep Iborra, «mi principal maestro, que murió hace dos años».

Afirma que le gusta trabajar en colaboración, «casi siempre en equipo», como en su última obra poética, que se apoya en grabados del artista Josep Díaz, y anuncia otros dos próximos libros que ya está escribiendo. Los dos sobre la comarca de L’Alt Palància: una novela juvenil y un estudio de investigación sobre el habla de los pueblos de la zona, de clarísima influencia aragonesa y con muchas palabras derivadas del valenciano.

Con estas dos obras sumará 109, a razón de casi tres por año de carrera, por lo que comentamos, en broma, si se le puede decir que es un acaparador, y responde: «Cada ú té que fer lo que pot fer.

Fuente: http://www.lasprovincias.es