RAFAEL MARTÍN ARTÍGUEZ. CRONISTA OFICIAL DE LA CIUDAD DE SEGORBE
Hoy, Día Mundial de la Radio, celebra también España el centenario de la llegada de las primeras emisiones radiofónicas.
Y ambas efemérides traen de nuevo al primer plano de la actualidad a un ingeniero militar, nacido en Segorbe, al que últimamente se le atribuye la invención de la radio: Julio Cervera y Baviera (1854-1927).
Algunos investigadores mantienen que la radio fue un invento colaborativo, en el que sus actores, en distintas partes del mundo, aportaron sus conocimientos para el mismo fin. Puede haya algo de cierto porque hay constancia que Cervera mantuvo contactos en Gran Bretaña con Marconi y también con Popof y no tanto con el austro americano Tesla, los cuatro competidores y que tienen sus partidarios en sus países de origen, pero lo cierto es que solamente el primero, Julio Cervera, puede presumir de haber hecho las primeras transmisiones de voz a través de las ondas entre Jávea e Ibiza.
Fue en el año 1902, el mismo en el que bajo su dirección se constituye la ‘Sociedad Española de Telegrafía y Telefonía sin hilos’. Hablar de telefonía sin hilos es ni más ni menos que hablar de la radio aunque tardó muchos años en llamarse así.
Tal como se ha podido demostrar con estudios recientes del profesor de la Universidad de Navarra, Ángel Faus (1936-2020), Cervera iba por delante de Marconi en todo lo referente al dominio de las ondas hertzianas primero con la telegrafía sin hilos cuya primera patente registró en el año 1897 en el Reino Unido y posteriormente en otros países europeos. Los periódicos españoles de la época recogen a primeros de octubre de 1899 la noticia de la concesión de “patente de invención por un aparato de telegrafía sin hilos, al comandante de ingenieros don Julio Cervera, ilustre hijo de Segorbe”.
Pero entre los gobernantes existían otros intereses que aconsejaron adquirir tecnología alemana, concretamente Telefunken, para aplicarla en España.
En este mismo desengaño cayó Cervera cuando inventó un sistema para el control remoto de torpedos y explosionar bombas a distancia y sin cables (fundamento del mando a distancia que también patentó) dentro de los objetivos militares que como comandante de ingenieros tenía encomendado. Pero tampoco se financió el proyecto y cuando los japoneses utilizaron un
sistema para dirigir torpedos en el ataque a Port Arthur, en la guerra Ruso-japonesa, Cervera se ‘estiraba de los pelos’ cuando seis años antes él ya había inventado un sistema similar con la misma finalidad.
Como ingeniero realizó otros numerosos proyectos y tuvo resultados extraordinarios en otras actividades como la medicina, la política, el periodismo, la educación, la masonería, la Guerra de Cuba, pero en los últimos años de su vida cayó en el olvido.
Dicen que algo tuvo que ver su adhesión a los postulados republicanos en los tiempos de la Dictadura de Primo de Rivera. Lo cierto es que hasta bastante tiempo después de su muerte, ningún periódico recogió su fallecimiento, ocurrido en Madrid en 1927.
Hoy tiene un aula de lectura a su nombre en Madrid (UCM), calles en Ponferrada, en Valencia (UPV), en Tenerife… y en Segorbe
El próximo día 26 de este mes de febrero se cumple el 170 aniversario de su nacimiento.
Hoy se le reconoce como el inventor de la radio.