Arxiu diari: 13 de desembre de 2022

«ME QUEDARÍA CON EL ALFAFAR DE PRINCIPIOS DEL SIGLO XX»

Como CRONISTA OFICIAL DE ALFAFAR, JOSÉ ANTONIO CATALÁ busca la forma de que los más jóvenes continúen con el sentimiento de pertenencia que tienen en su generación.

La historia de un pueblo se pierde si no se escribe. Esa realidad que nos permite conocer nuestro pasado y aprender para nuestro futuro, es más palpable en una sociedad como la actual, tan rápida y, por momentos, efímera.

En este contexto emerge con mayor importancia la figura del CRONISTA OFICIAL DE ALFAFAR, representada por JOSÉ FRANCISCO CATALÁ, quién, aún sin saber todavía cómo lo logrará, espera que la juventud se acerque a las personas mayores para, juntos, transmitir el legado histórico de todo un pueblo.

¿Qué se siente al ser cronista oficial de su pueblo?

Se siente una responsabilidad muy grande y un compromiso de cubrir las expectativas que la gente ha puesto en ti al nombrarte, dejarles bien.

¿Es consciente de que tiene la historia de todo su pueblo a sus espaldas?

No, porque hay más gente que trabaja en esto, pero uno de ellos sí que soy yo. Empecé a escribir sobre mi pueblo en el año 2002 que publiqué un libro que se llama ‘Crónicas de Alfafar’, donde escribí todo lo que yo sabía hasta entonces de la localidad.

Más tarde he publicado otros libros como en 2010, ‘100 anys del Casino de d’alt’, ‘Historia básica de Alfafar’ al voltant de la parroquia, y, por último, ‘Alfafar en el Siglo XX’.

«La gente más joven no tiene ese concepto de pueblo como las personas mayores, es muy distinto»

¿Con qué época se quedaría?

Principio del siglo XX. Es una época de mucha actividad en Alfafar, tanto política como social. En aquella época hay en el pueblo con mucho movimiento político porque aquí la CET tenía mucha personalidad, y también es un momento en el que afloran muchas actividades importantes en el Ayuntamiento como es el alumbramiento de las aguas potables en 1912, la construcción del casino en 1919, un congreso de obreros del camp… es un periodo muy extenso.

Se nota el orgullo en sus palabras cuando habla del Casino. ¿Es su lugar favorito de Alfafar?

Es mi lugar favorito, todos los días desayuno aquí (risas). En el Casino se forman muchas tertulias.

¿Hablan en esas tertulias de la historia de Alfafar?

Se habla de todo un poco. Se habla de todo lo imaginable.

¿Ha sentido la obligación de tener que hacer de juez o moderador en alguna de esas tertulias?

Alguna vez he tenido que decir algo pero no mucho, la gente en general sabe lo que dice. Cuando hablan de lo que hablan, saben lo que están diciendo.

«El Casino es mi lugar favorito, se forman muchas tertulias»

¿Considera que eso sucede solo con gente de cierta edad? ¿La gente joven es conocedora de la historia del pueblo?

La gente joven no es tan conocedora de la historia. Me estoy refiriendo a personas de más edad, como los que ya estamos jubilados, que somos los que más nos reunimos en este centro. La juventud no le tiene mucha afición a este tipo de centros y entra poco. Pero los que estamos lo pasamos lo mejor que podemos.

Me temo que era una respuesta previsible… ¿Cómo podemos conseguir que eso cambie en el futuro?

Es difícil saber cómo se puede conseguir porque la juventud no se presta demasiado al contacto con la gente mayor, así que es difícil saber que podemos hacer para atraer a la juventud, no lo sabemos. Tenemos una programación cultural en la que hay charlas, presentaciones de libros, exposiciones de pintura… hacemos cosas, pero la juventud no se interesa por nuestras actividades.

Es decir que aun así no consiguen que los más jóvenes de Alfafar se involucren en todas esas actividades…

A nosotros nos gustaría tener gente joven en la directiva del centro para que ellos aportaran ideas que fueran interesantes para las personas de su edad, porque nosotros aun queriendo no sabemos llegar a la juventud.

Los libros están ahí, pero hay que despertar el interés en leerlos. ¿Qué personaje de la historia de Alfafar elegiría usted para atraer la atención de la gente joven?

Podríamos presentarles a Gregorio Gimeno Martínez, Pep de l’horta, que es un luchador del final de la época Feudal y el principio de la Guerra de independencia contra el francés. Es un guerrillero y tiene unas actividades muy curiosas, y es muy agradable el saberlo y estudiarlo.

«Para mí Alfafar es la patria»

¿Qué significa para usted Alfafar?

La patria.

En una sociedad que vive en áreas metropolitanas, ¿perdura ese arraigo o se está perdiendo?

Se va diluyendo ese sentimiento. La gente más joven no tiene ese concepto de pueblo como las personas mayores, es muy distinto. Aquí hay personas que han vivido en Alfafar cuando tenía 4.000 habitantes y se conocían prácticamente todos, y ahora somos más de 20.000 y no nos conocemos casi nadie.

¿Qué podemos hacer para que vuelva ese sentimiento?

Yo por mi parte lo que hago es plasmar ese sentimiento en los libros para que aquel que quiera lo pueda leer. Pero volver a tener ese sentimiento que teníamos antes o tenemos los mayores es difícil que se vuelva a tener, y cada vez más.

¿Cuál es su próximo reto como cronista?

Mi próximo reto es la recopilación de los artículos que salen en el libro de fiestas de cada año en Alfafar y publicarlos todos ellos en un tomo. Empiezan en 1944, el primer libro que tengo, y hasta este 2022, que es el último que se ha editado.

Fuente: https://aquimediosdecomunicacion.com