GABRIEL SEGURA CIERRA UNA ETAPA DE 13 AÑOS COMO PRESIDENTE DEL CENTRO DE ESTUDIOS LOCALES DEL VINALOPÓ

El CRONISTA OFICIAL DE ELDA reivindica en su despedida la necesidad de crear conciencia de comarca “porque las tierras del Vinalopó constituyen la columna vertebral de la provincia de Alicante”.

PÉREZ GIL

El CRONISTA OFICIAL DE LA CIUDAD DE ELDA, historiador y arqueólogo GABRIEL SEGURA deja la presidencia del Centro de Estudios Locales (CEL) del Vinalopó tras 13 años -3 legislaturas más un año de prorroga extraordinaria por la pandemia- porque considera que su momento ya ha pasado. Sus circunstancias personales, familiares y laborales han cambiado, y todo lo que podía aportar al CEL Vinalopó estando en primera línea ya lo ha hecho. Ahora considera que debe dar un paso atrás y dejar que otros socios, con renovadas ganas, asuman responsabilidades, abran una nueva etapa y aporten nuevo aires, nuevas ideas. Considera que es necesario y recuerda que cogió el testigo de la mano de Tomás Pérez Medina, presidente del Centro de Estudios Locales (CEL) de Petrer y primer presidente del CEL Vinalopó. Tras los años fundacionales y etapa inicial del CEL, Gabriel Segura asumió la presidencia en la Asamblea General celebrada en La Romana.

Entre sus principales logros figura, a parte de continuar con la labor editora de la Revista del Vinalopó, que ya ha alcanzado los 23 números, hacer visible al CEL en todos los municipios del Vinalopó. “La asociación no podía ni debía quedarse encorsetada en el perímetro de Elda-Petrer sino que había que llevarla a todos los municipios, e incluso fuera de nuestro ámbito comarcal, llegando al espacio provincial. Creo que esa presencia del CEL en la mayor parte de los municipios es prueba de ello, además de la colaboración con entidades hermanas como la Asociación Torre Grande de Almansa y el CEL de Yecla y Norte de la Región de Murcia”, destaca.

Esta presencia ha permitido que el CEL Vinalopó sea considerado un agente social y cultural de pleno derecho a nivel comarcal, e incluso regional. Prueba de ello es por un lado la implicación de diversos ayuntamientos en el patrocinio de la propia Revista del Vinalopó, entendida como una actividad cultural a nivel comarcal; la integración del CEL en el denominado “Espai Valor” o en la FIECOV que integran tanto a nivel provincial como autonómico a todos los institutos y centros de estudios, respectivamente.

Así como la oportunidad de participar en foros ciudadanos y consejos municipales de cultura de diversos municipios, así como comarcales y provinciales. A este respecto, uno de los últimos logros de los que se siente más orgulloso es la celebración de un Congreso de Estudios Históricos de ámbito intercomarcal, interprovincial e interautónomico, como fue el Congreso del 775 aniversario de la conquista del Norte del reino de Murcia, celebrado en el 2019 y organizado por todo un conjunto de asociaciones y colectivos comarcales y locales de Murcia, Albacete y Alicante.

Pero también hay objetivos no alcanzados. Algo que justifica señalando que “el habernos volcado, las sucesivas directivas, en la promoción del CEL quizás nos ha hecho descuidar la motivación de los socios que ha generado una poca o una escasa implicación en la vida de la asociación. Esto ha hecho que no se hayan podido llevar a cabo proyectos como la renovación de la página web de la asociación, la creación de una base de datos de la biblioteca del CEL para que los socios puedan consultar y utilizar todos los recursos bibliográficos de los que disponemos por intercambios con otros institutos y centro de estudios locales y comarcales de toda la Comunidad Valenciana”.

Trabajar “por amor al arte”

El CEL Vinalopó no es muy conocido por el gran público por la sencilla razón de que quienes lo forman no son de ningún pueblo en particular sino de todos. Y eso conlleva pagar un precio. Sus miembros trabajan en pro de la cultura “por amor al arte” porque creen en el proyecto. Pero los recursos económicos escasean para emprender proyectos de amplia cobertura y los recursos humanos no llegan de forma continuada para que la sociedad en general los perciba como ellas quisieran.

Trece años después de la llegada de Gabriel Segura a la directiva del CEL Vinalopó, conserva intacta su creencia de que esta entidad es necesaria en el territorio que abarca. “Es necesario crear conciencia de comarca. Las tierras del Vinalopó constituyen la columna vertebral de la provincia de Alicante. Ya dijo el escritor Azorín que el verdadero Alicante, el castizo, no es el de parte que linda con Murcia, ni el que está en los aledaños de Valencia, es la parte alta, la montañosa, la que abarca los términos y jurisdicciones de Villena, Biar, Petrer, Monóvar, Pinoso, es decir, el Vinalopó”.

Esta asociación cultural, sin ánimo de lucro, agrupa a un buen puñado de gentes de las comarcas del Vinalopó, y de otros puntos de fuera, interesados en la difusión del conocimiento de la amplia panoplia de las Ciencias Sociales. “Creemos en nuestra identidad comarcal, creemos que los pueblos del Vinalopó tienen más puntos de unión que puntos de divergencia. Por eso somos un grupo de personas que intentamos hacer pedagogía comarcal, pues estamos convencidos de que juntos somos más fuertes que separados. El CEL Vinalopó no es otra cosa que una herramienta social para la creación de conciencia comarcal”, subraya.

Frente a los momentos iniciales de la asociación, cuando contó con el apoyo incondicional de la Mancomunidad Intermunicipal del Valle del Vinalopó, durante los últimos 13 años la base de apoyo oficial municipal y provincial se ha ampliado considerablemente. Ayuntamientos como Crevillent, Aspe, Pinoso, Novelda, Monóvar, Elda, Petrer, Sax o Villena apoyan de un modo u otro, pero de forma directa, al CEL Vinalopó. Y el apoyo incondicional de la Diputación Provincial de Alicante, a través del Instituto de Cultura Juan Gil-Albert, también ha sido muy importante.

“Los árboles no nos dejan ver el bosque”

A juicio de Gabriel Segura las diferentes comarcas del Vinalopó están unidas por las gentes pero separadas por los políticos, no por la política. “Las personas cambiamos de municipio o de comarca para trabajar, para ir de fiesta, para nuestras relaciones familiares…Sin embargo la desconfianza y suspicacia de unos municipios con otros, alentada por el personalismo y proyección de unos alcaldes u otros, viene derivada del hecho de ser unas comarcas con una alta densidad demográfica, donde hay una gran cantidad de municipios con similares rangos de población. Esto hace que se genere desconfianza en lugar de sinergias, imposibilitando la cristalización de políticas transversales de colaboración intermunicipal en asuntos diversos que benefician a todos los habitantes, independientemente del municipio donde residan. Yo lo resumiría en una moraleja: los árboles no nos dejan ver el bosque”, destaca a modo de reflexión.

El cronista oficial de Elda dejará de presidir el Centro de Estudios Locales del Vinalopó a partir de este sábado 18 de junio de 2022 cuando se celebre la asamblea extraordinaria en Villena. Atrás deja momentos muchos buenos. Como la convivencia con los miembros de las sucesivas directivas durante estos trece años y por supuesto con los socios de forma anual en las asambleas celebradas. Pero también recuerda momentos malos. Sin lugar a duda el peor fue el fallecimiento de su amigo y compañero Paco Tordera, que fue el tesorero del CEL Vinalopó que regularizó y optimizó las cuentas económicas para luego encargarse, de forma meritoria, de la dirección de la Revista del Vinalopó. “Un amigo, un compañero, un confidente al que todos los días sigo echando de menos”, lamenta Segura.

Para él lo que identifica al Alto, Medio y Baix Vinalopó también las diferencia de otras comarcales aledañas. “Somos unas comarcas de tránsito y de comunicación. La propia cuenca del río Vinalopó ha marcado desde la Prehistoria la idiosincrasia de sus gentes. Una comarca heterogénea y eso es nuestra característica. Somos una comarca de frontera entre espacios históricos y geográficos diferenciados; somos el nexo de unión de otras comarcas. Una gran comarca, subdivida en tres comarcas, en un espacio fronterizo entre los antiguos reinos de Castilla y de Valencia; a medio camino entre el interior peninsular y la costa mediterránea. Una comarca dual, con dos lenguas, como señas de identidad: valenciano y castellano. Una comarca también dual en lo económico: una comarca industrial pero con un importantísimo sector agrícola productivo. Es precisamente esa heterogeneidad y esa dualidad la principal característica de las tierras y gentes del Vinalopó”, destaca.

“Cabeza de ratón antes que cola de león”

En su despedida al frente de la presidencia admite que el Vinalopó no tiene el peso que se merece en relación a su importancia demográfica y económica, a sus iniciativas empresariales y sociales. Una circunstancia que, en su opinión, viene derivada de “la falta de grandeza de miras políticas. En nuestros pueblos, en especial en los más grandes, queremos ser cabeza de ratón, antes que cola de león. Actitud miope que resta oportunidades de desarrollo económico, que impide el surgimiento de sinergias territoriales que benefician a todos los ciudadanos independientemente de donde residan. En la sociedad globalizada de la comunicación, no se entienden que las fronteras y la administración municipal sean obstáculos de desarrollo para un territorio como es el Vinalopó”, subraya añadiendo que “es innegable que el Vinalopó es una unidad geográfica por su configuración, que comprende hasta Caudete. En los tiempos históricos por supuesto que constituimos una unidad histórico-cultural en el caso del Medio y Baix Vinalopó -Reino de Valencia- a la que en el siglo XIX se incorpora Villena y Sax, conformando el Alto Vinalopó con el resto de municipios valencianos de aquella comarca”.

Sin embargo Segura puntualiza que en el plano administrativo la descentralización autonómica mediante las comarcas lleva décadas parada; “y en lo político prima en exceso el municipalismo mal entendido, derivado del similar tamaño de los municipios. Desde el CEL Vinalopó siempre hemos echado de menos esa política de altas miras que, elevándose sobre los árboles de cada uno de los corralitos, vea que somos un bosque.. y que lo que es bueno para el municipio vecino, siempre repercutirá positivamente en el nuestro y en los vecinos”.

Y respecto a la cultura, en su concepción más amplia, señala que no es más que una manifestación del interés de la sociedad por conocer su entorno, por enriquecerse, por disfrutar de sus fiestas, de su gastronomía, de sus paisajes, de su flora y fauna, por relacionarse con su territorio, su historia y sus gentes. Tiene claro que la sociedad actual ya no es la misma que la sociedad del año 2009. “Hay factores tecnológicos o sociales nuevos que hacen que todo sea diferente. A lo que se suma que los que allá por el año 1995-1996 creímos en la iniciativa comarcal del Centro de Estudios Locales, hoy tenemos más años, somos de una o dos generaciones anteriores. Un factor biológico que hace precisamente necesaria esta retirada para dejar paso a gente más joven que explore nuevos canales de comunicación, nueva maneras, nuevas líneas de trabajo…”.

Críticas y agradecimientos

“Críticas… solo a mí mismo, por todo lo no hecho, por no haber podido dedicar más tiempo a la asociación. Como voy a criticar a nadie si en estos 13 años me he sentido arropado y respaldado por socios y compañeros de directivas. Y agradecimientos, pues a todos los socios en primer lugar, por su respaldo y apoyo durante estas tres legislaturas, a los compañeros de tareas por su esfuerzo y dedicación; a los concejales y diversos alcaldes de todos los colores políticos y de todos los municipios en los que hemos estado presentes por creer en nosotros, por brindarnos la oportunidad de llevar al CEL Vinalopó por todos los rincones de las comarcas vinaloperas; a bibliotecarios, archiveros y técnicos de cultura de toda la comarca por erigirse en cónsules de la entidad en sus respectivos municipios; a todas los autores que han colaborado con nosotros de forma desinteresada con sus trabajos; a todas las personas que, sin ser socios, han comprado nuestras publicaciones, ayudándonos a seguir adelante”, señala por último el eldense que este sábado dejará de ser el presidente del CEL Vinalopó.

Fuente: https://www.informacion.es