Arxiu diari: 26 de març de 2020

JUEVES, 26 DE MARZO. DUODÉCIMO DÍA. NOTICIAS QUE NO IMPRESIONAN

Francisco Perez Puche. Foto de Juan J. Monzó

FRANCISCO PÉREZ PUCHE, CRONISTA OFICIAL DE VALENCIA

Se publica que se han aplazado los Juegos Olímpicos, o que la India ha dictado orden de confinamiento para 1,300 millones de personas y nos quedamos tan panchos. Son noticias  tan insólitas como la llegada del hombre a la Luna o la caída del Muro de Berlín, pero estos días las despachamos como menudillos.

Y es que todo es relativo, empezando por las noticias, que gradúan su importancia en función de nuestros intereses y proximidad. No puede ser igual de apreciable el confinamiento de la India que mi propio ncierro. No soy igual de sensible ante la falta de previsión que haya podido haber en un país lejano que ante la que afecta o puede afectar a mi familia.

Este asunto, el de las previsiones y las imprevisiones, el de la toma de decisiones en el momento justo, va a dar mucho juego en los meses próximos. Ha llegado a la política y se va convertir en la canción del verano: el no-se-cuántos de febrero se podía haber decidido que… Se podía haber decidido, pero no se decidió. De manera que antes de la manifestación del 8 de marzo hicimos la “Crida” el día 1; y desde esa fecha, alguna que otra “mascletà”, faltaría más…

¿Cuándo era el momento adecuado? No hay momentos adecuados, sino momentos de decisión: y cuando se disparaba la “mascletà” a las dos de la tarde, unos iban y otros decidían no acudir.

Pues nada, duodécimo día de encierro. El “MSC Eloane” sigue navegando a todo trapo, ahora por el sur de la India, un continente en sí mismo, donde mil trescientos millones de personas tienen instrucciones de quedarse en casa, porque es mejor. ¿La India entera encerrada en casa? Para empezar, debe haber algunos millones que no tienen casa, los pobres. Para empezar, va a haber que ponerse muy serios porque se me antoja que aquella es una nación inabarcable. Uno de los problemas más graves de la India es cómo cumplir con la necesidad de hacer que la electricidad llegue a todo su territorio, cosa que aún no ha conseguido, y al mismo tiempo ir desprendiéndose del carbón como fuente de producción de electricidad.

Quizá estoy muy equivocado. Puede que en la India haya mucho más sentido de la disciplina que aquí y una organización estatal que no imaginamos. Pronto lo veremos. En todo caso, maravilla comprobar la rapidez con que nos hemos adaptado –de febrero a marzo– a que noticias que hubieran tenido una extraordinaria relevancia hace muy poco estén siendo sobrepasadas por decisiones que no tienen el más mínimo impacto en nuestro ánimo sobrecargado. Te dicen que se ha ordenado a mil trescientos millones de personas quedarse en casa y ya no te inmutas.

Fuente: https://fppuche.wordpress.com/

CASINOS: DÍA 25 DE MARZO, A LAS DOCE HORAS, VOLTEARON LAS CAMPANAS

JOSÉ SALVADOR MURGUI, CRONISTA OFICIAL DE CASINOS

El día amaneció lluvioso, tan lluvioso y triste como fue la noche. Parece como si el cielo estuviera contagiado por la pena de la tierra. Ayer día 24 día quedó suspendido en la memoria con el ruido de esos motores turbo, pulverizando y desinfectando las calles de Casinos. La noche nos envolvió con su silencio y a esperar el nuevo día. Un mensaje desde Italia, donde le preguntaba a un amigo Alcalde de una ciudad  como  estaba, la respuesta fue contundente a las 23,13: “Emergenza continua.”  Creo que no necesita traducción.

Así pasan los días, entre mensajes, momentos de crispación, saturación de redes, hablando virtualmente con amigos, reencontrándote con otros  y aunque sea de forma telefónica, interesándote por muchos, compartiendo momentos, ayudando a que estos días lentos pasen de forma veloz y logremos pasar de la pesadilla al nuevo amanecer.

La crispación no es buena, sembrar malestar estos días no conduce a nada, afinar odios y rencores no es buena terapia… se apela en muchas ocasiones a la palabra “juntos”, palabra que inspiro grandes temas musicales,  palabra en muchas ocasiones olvidada en favor del egoísmo, en favor del “yoismo”, aunque lo único verdadero en este tiempo es la vocación de nuestros  sanitarios  que demuestran la unidas y atención a los enfermos haciendo todo lo posible  para que salgamos adelante.

Es necesario ser consecuentes con nuestros pensamientos. No estamos en un buen momento.  Tenemos demasiada tendencia a pensar  MAL,  a ver el mal… a sentirnos mal. El  Dr. D. Juan Cruz, Profesor honorario de Filosofía en la Universidad de Navarra, en su Historia: Ideas sobre el mal nos dice: “Metafísicamente, que es la acepción más general, se dice que el mal es “lo contrario al bien”: dicho de una cosa, significa que es nociva o daña y lastima, y así se habla de mal cuerpo, del mal humor; dicho de una propiedad, es la enfermedad, la dolencia, la desgracia, la calamidad.”

El bien siempre debe vencer al mal. Frases como la de Juan Pablo II “No tengáis miedo”, nos deben hacer fuertes, saber que todos remamos en la misma dirección, nos da seguridad; estos días en los que sentimos, nos unimos, nos abrazamos a la fe y a la esperanza con tanta fuerza, deseamos esa protección celestial para seguir adelante. ¡Cuántas personas me han llamado, pidiendo fotos, cantos, oraciones… ¡ ¡Cuantos silencios mudos en busca de una respuesta!

Entre estos discernimientos, recibo un mensaje del Cura Párroco de Casinos, D. Enrique, en el que nos anuncia que a las 12 horas sonaran las campanas en la hora del Ángelus, hoy  en el día que la Iglesia celebra la solemnidad de la Anunciación del Señor. Y el mensaje sigue: “Acabo de celebrar esta solemnidad unido a todos vosotros a mi querida comunidad parroquial, a todo el pueblo de Casinos, intercediendo por él. Dios nos ama a cada uno de nosotros con una profundidad que no podemos ni siquiera imaginar. Feliz día queridos hijos, en cada misa me uno a  vosotros, a vuestros miedos, a vuestras dificultades,  rezo por vosotros, y camino con vosotros. Vuestro Párroco que os quiere.”

Junto al mensaje unas fotos de una iglesia vacía, pero seguro estoy que muy presente en el pensamiento de muchos. ¡Cuántas ganas de salir a la calle, entrar en las casas, visitar la iglesia, venerar a los patronos… estar juntos otra vez! JUNTOS, PALABRA CLAVE…  Hoy en esta dispersión, en esta unidad  familiar,  en este confinamiento, necesitamos oír mensajes como el de D. Enrique: “Camino con vosotros.”Gracias por ese volteo de campanas, gracias por elevar nuestra súplica con el incienso que arde a los pies de los patronos, gracias por esas palabras de ánimo.

La música, las campanas, las colgaduras de los balcones, las calles limpias, son el anuncio de la fiesta, de las fiestas mayores que celebramos en agosto;  hoy día 25 de marzo, son la esperanza, la fe, la ilusión de que  un cielo nuevo y una tierra nos  nueva abrace a todos  y podamos sobrevivir a este momento, porque el reto es vivir,  el éxito es superar la calamidad, y por encima de todo pensar positivamente, el bien siempre vence al mal… y por supuesto el que obre mal, ya dará o daremos  cuentas, solo es cosa del tiempo… pero para caminar hacia la luz, dejemos atrás las tinieblas que nos envuelven.

Fuente: https://www.elperiodicodeaqui.com

MÁS O MENOS, LO DE SIEMPRE

FRANCISCO PÉREZ PUCHE, CRONISTA OFICIAL DE VALENCIA

Si este gobierno no eleva el pensamiento y abarca los grandes problemas nacionales, ¿a quién va a dirigir el pueblo su esperanza?». Cuando lo leo me da un vuelco el corazón. Pero sigo: «Hay quien afirma, con razones técnicas, que si hubiese habido una política sanitaria (…) no tendríamos que lamentar las muchas desgracias que está ocasionando la gripe neumónica, fiebre tífica o como quieran titular a la enfermedad que se extiende por el país».

En mi cuarentena, con el parque del Turia tras la ventana, me tengo que pellizcar. Un desconocido M., corresponsal político de LAS PROVINCIAS en Madrid, escribió estas reflexiones el 21 de septiembre de 1918. El baile de «la cucaracha», la pandemia europea, no había hecho más que empezar. Y se movía sobre el cañamazo de un país desabastecido a causa de la Guerra Europea, empobrecido y casi hambriento, y desde luego harto de inútiles batallas políticas.

La gente a lo que temía era al viejo cólera. Y el periódico, en el editorial de ese día, se esforzaba en dar la eterna batalla a los bulos: era una gripe, en realidad benigna, pero que podía complicarse: «Es necesario, pues, que se atiendan debidamente las prescripciones facultativas y que las medidas adoptadas por las Juntas de Sanidad sean cumplidas por todos los ciudadanos».

Han pasado 102 años. Pero asombran las similitudes, los comportamientos sociales repetidos, el esfuerzo del periódico por hallar el punto exacto entre los bulos y los miedos, entre la esperanza y la verdad. El corresponsal escribía al hilo de una situación que en Madrid era mucho más grave. E iba destilando ya la crítica política que empezaba a hervir en el Congreso y en los cafés. El Gobierno perdía el tiempo y no separaba lo accesorio de lo fundamental: intentaba controlar las horas de trabajo de los funcionarios pero no buscaba la harina que los horneros necesitaban: «Los ministros tienen el deber de ocuparse en cosas útiles», decía.

¿Cómo no trazar el paralelismo? ¿Cómo no situarse en el escenario de la inútil manifestación del 8 de marzo y en las ridículas pugnas televisivas de unos miembros del gobierno a los que el virus ha atacado por igual?. El corresponsal de 1918 insiste: «¿No era más interesante la defensa de la salud de los españoles, que buscar el modo de molestar a los funcionarios públicos o de discutir la oportunidad de las delegaciones de la Mancomunidad Catalana?

Ahí está, como siempre, la radiografía -clínica pura- de un país con la misma dolencia un siglo y el siguiente: enfermedad, política errática y, como un martillo pilón, el asunto de Cataluña.

Fuente: https://www.lasprovincias.es