J. PAYÁ NICOLAU, CRONISTA OFIC. DE LA VILAJOYOSA
El 25 de abril de 1745, y habiéndolo decidido mucho antes, Miguel Llored (sic) visitó al notario Isidro Miquel. Este Llored llevaba la intención de quedar bien con su propia conciencia y saldar cuanto antes aquello que le perturbaba, creemos. Una vez ante el escribano público, y acompañado de personas en el papel de beneficiarios y testigos del paso que iba a dar, se expresaba de este modo: “Que está poseyendo una pieza de tierra en el pago apellidado, la Coveta Fumada (subrayado este nombre en el documento) termino y Jurisdiccion de esta Villa (por Villajoyosa), y âquella misma que consta, y âparece en la escrª.de establecimtº., ô Venta. que otorgaron â su favor, los Señores Capitulares, de esta referida Villa (La Vila), y autorizó Frcº Vaello escrvº., baxo cierto calendario en el áño pasado mil setecientos, y quarenta; y en atencion áque tiene por cierto, de que la sitada tierra es propia de Tereza Ots, muger de Gaspar Llored su hijo, y le causa escrupulo, al referido Miguel Llored el estarla poseyendo y disfrutando, yá años haze: Por tanto, y âtendiendo â los motivos que lleva expresados, en aquella mejor via y forma, otorga, que haze renuncia, formalmente de la dicha pieza de tierra, pago de la Coveta fumada, en favor, de los referidos, Gaspar Llored, su hijo, y Tereza Ots consortes, pª.que ambos dispongan de dchª.tierra â sus voluntades, como dueños absolutos, sin dependencia alguna, exceptuando â los clerigos, lugares santos y Militares, Monasterios y Hospitales, y a los demas prohibidos en la Real Cedula de S. Magtad. de nueve de Julio año passado Mil settessientos treinta y nueve”. (El cronista no entiende como actitud moral el significado de la excepción señalada por Llored, pero no le extraña nada que las corporaciones citadas, clérigos y militares, pudieran disponer de ciertas propiedades en tiempos tan “oscuros” como aquellos…).
Este otorgante daba por nula la escritura que en su día le concedieron los miembros del Ayuntamiento vilero, “… y desde aora pª.siempre se desiste, quita y aparta del derecho que tenia, âdchª. pieza de tierra, y lo transfiere en los dchºs. Garpar Llored y Teresa Ots. (En realidad, y como dice el pueblo llano, era eso que “tot cau en casa”). Pedro Llorca de Antonio fue uno de los testigos de aquella renuncia, y Juan Vinaches. También firmaría Juan Llored, el hijo agraciado.
Ciertamente, en esas fechas no se había resuelto el pleito sobre la línea divisoria entre La Vila y El Campello, que en la actualidad está fijada por expoliación, creemos, ¡y qué remedio!, en el Carritxal. Sin embargo, no debe ser esta Coveta Fumada el paraje que se conoce hoy por ese nombre en la costa de El Campello, pues el término de Villajoyosa nunca ha tenido territorio más allá del Río de Aguas. La cueva en cuestión puede ser la que hoy se conoce como de Milhòmens, cerca del Cantal.., si bien en eso no nos sentimos autorizados.